Según el Barómetro "Confianza de los Arrendadores", promovido por la Asociación de Arrendadores de Lisboa (ALP) y que recogió las respuestas de 770 arrendadores, la cifra más resonante se refiere a 186 arrendadores, que admiten estar pasando por una situación en la que, teniendo casas alquiladas, registran retrasos en el pago de los alquileres. En el mismo ámbito, el 23,7% registra retrasos de menos de dos meses y el 31% admite llevar un retraso de más de seis meses.
La ALP comenta: "de estos arrendadores que sufren pérdidas, aproximadamente un tercio (31%) sufren pérdidas de entre más de seis meses y más de 18 meses (...) una cuarta parte de los arrendadores víctimas de incumplimientos contractuales acumulan pérdidas de entre tres y seis meses de ingresos". Esto preocupa a la Asociación de Arrendadores, sobre todo porque, para el 21% de los encuestados, estos alquileres corresponden a la totalidad de su fuente de ingresos.
Este barómetro se realizó a raíz de las medidas anunciadas por el Gobierno, del paquete "Más Vivienda", sin embargo, a pesar del esfuerzo por proteger a los propietarios, sólo tres de cada diez afirman haber activado ya el legítimo derecho al desahucio, en los tribunales, o haber recurrido al "Balcão Nacional de Arrendamento" que permite el pago del alquiler de los inquilinos por el Gobierno, que lo asume. Existe, según la ALP, un "empate" que impide a los propietarios avanzar por la vía judicial, lo que se justifica por el "humanismo y comprensión hacia la situación de sus inquilinos", según el 29,7% de los propietarios.
El Presidente de la ALP, Menezes Leitão, afirma que se trata de situaciones de incumplimiento muy recurrentes y asume su preocupación por los arrendadores, que se sienten agraviados por ese mismo motivo, y comenta: "la idea presentada por el Gobierno, que es la de dar una subvención cuando hay incumplimiento de los alquileres, en nuestra opinión va a agravar este incumplimiento (...) los inquilinos no se molestarán en pagar el alquiler. Verán que ni siquiera merece la pena preocuparse por pagar, [porque] si hay problemas, será el Estado el que sustituya al inquilino y eso, en nuestra opinión, será un factor que probablemente agravará los impagos de alquiler."