La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha declarado: Nuestro plan de emergencia para reducir la demanda de gas en toda la UE ya está en vigor y varios Estados miembros ya han dado pasos valiosos y voluntarios hacia nuestro objetivo: juntos, nos proponemos reducir el uso de gas en al menos un 15%. Estas medidas van de la mano de la premisa de que ahorrar energía es vital para la seguridad energética de la Unión Europea (UE). Actualmente, ante la guerra de Ucrania, se han cortado los suministros rusos a la UE, por lo que el ahorro energético es vital para la seguridad energética de Europa, afirma el líder del Ejecutivo comunitario. La salvaguarda ante una posible interrupción del suministro de gas desde Rusia es reducir el consumo en la UE al menos en un 15% para la primavera de 2023, almacenando así el máximo en los Estados miembros. El reglamento entró en vigor tras una deliberación política en Bruselas, donde los 27 se reunieron y llegaron a un acuerdo en torno a la propuesta presentada por la Comisión Europea. El Consejo de la UE aprobó y adoptó formalmente el reglamento. Prevé la posibilidad de crear una alerta de la Unión en caso de escasez, un escenario en el que sería obligatorio reducir la demanda de gas. Portugal, según Duarte Cordeiro, ministro de Medio Ambiente, afirma que puede deducir un conjunto de circunstancias en las que también se enfrenta, como la producción de electricidad en la seguridad del sistema o la necesidad de utilizar el gas como materia prima en industrias o sectores indispensables.
Con el inicio del próximo curso académico a la vuelta de la esquina, los alumnos que estudian fuera de casa buscan habitaciones para alquilar durante el periodo lectivo. Sin embargo, las circunstancias no son las mejores, la oferta ha caído un 44% en el último año, y los precios se han disparado en los dos mayores distritos del país, Lisboa y Oporto. En Oporto se ha producido un aumento del 20%, hasta los 350 euros mensuales. Le sigue Aveiro, con una variación del 19,8%, hasta los 300€, y la capital, Lisboa, con un aumento del 18,1%, hasta los 420€. Hubo un descenso de la oferta, que cayó un 60%. La ciudad de Oporto fue la que registró más caídas, (-84%), Lisboa con (-77%), Leiria, (-71%), Aveiro y Setúbal registraron una caída de (-69%), seguida de Faro, con (-67%) y finalmente Coimbra, (-39%). De estas ciudades, ninguna mostró un aumento de la oferta en el último año.
En cuanto a la producción en la construcción, se produjo un aumento interanual en valor porcentual, pasando del 1,9% en mayo al 1,7% el mes siguiente. Esto se debe a una disminución de la actividad en ambos lados. La construcción de edificios registró un aumento del 2,0% en junio, mientras que en mayo las cifras rondaban el 2,2%. La Ingeniería Civil, que mostró una variación del 1,5% en mayo, pasó en junio al 1,2%, según el INE. Los índices de empleo y de remuneración registraron en junio variaciones equivalentes del 2,0% y del 6,2%. En el mes de mayo estos índices presentaron valores de tasa de variación del 0,1% y del 9,8%, valores superiores a los de 2021, con tasas de variación del 0,2% y del 10,2%.